miércoles, 13 de noviembre de 2013

ANÁLISIS DEL "DIARIO de Greg 6 ¡Atrapados en la nieve!"



 Creo que ya va siendo hora de publicar mi análisis del libro...



Jeff Kinney
Diario de Greg 6 ¡Atrapados en la nieve! y los otros 6 libros de la colección están escritos e ilustrados por Jeff Kinney, también conocido como "el jefe". El título original es Diary of a Wimpy Kid. Cabin Fever, así que una vez más, nos damos cuenta de que son innumerables los títulos originales que no se corresponden con la traducción, aunque supongo que se tratará de un asunto de marketing para poder vender el libro en nuestro país. La editorial, RBA Libros, S.A., editó el libro en España en 2012, aunque el libro en versión original ya había sido publicado en 2011 con Amulet Books. Su idioma original es el inglés, y la edad recomendada para empezar con su lectura es a partir de los 9 años. Un total de 217 páginas escritas a modo de diario y acompañadas por imágenes de cómic que hacen de la lectura algo divertido.
A través de su página web, diariodegreg.com , podemos conocer más sobre los personajes, los libros, juegos, hay una sección para los padres... Las sagas más actuales de libros infantiles llevan bajo el brazo una completa página web repleta de interesantes recursos que tanto padres como niños pueden emplear (por ejemplo, un caso similar a éste es el de Gerónimo Stilton).


·   ¡Caaaray! Y... ¿cómo es el libro?





 
     El aspecto externo de los libros es muy importante, y más si se trata de libros destinados a niños. En el caso de todos los Diarios, las portadas son duras (más resistentes) y el peso es adecuado para la edad. Los colores son muy atractivos y llaman la atención. Si nos detenemos en el sexto libro, se trata de un azul cielo, y la imagen de la portada es la del protagonista viendo cómo la nieve va poco a poco llegando hasta la ventana, y, al igual que en el resto de ilustraciones del interior, está en blanco y negro, por lo que se mantiene la unidad. Pero no sólo (sí, soy de las que AÚN ponen sólo con tilde) es importante el aspecto externo, ya que en este caso no debemos perder de vista el formato interno.
     Al tratarse de un diario, el interior del libro tiene esa misma apariencia: la de un diario. Aunque Greg ya nos deja claro lo contrario en la mismísima web:



    
No obstante, en el interior vemos desde la primera página como todas y cada una de las hojas tienen las líneas típicas de los diarios. Si un niño de 10 años escribiera en un folio no escribiría recta ni una frase, y esto les ayuda. El narrador, Greg, escribe en primera persona todos y cada uno de sus pensamientos (sí, todos y cada uno de ellos, que nos está hablando de la nieve y de repente se pone a explicarnos cómo es el árbol que tiene al lado) y para ello se apoya en las líneas dibujadas del diario.

Detalle del día
     El libro no se divide en capítulos, sino en días. Dïa a día nos va contando todo aquello que le pasa (siempre tiene mala pata, qué le vamos a hacer), lo que piensa de lo que hacen los mayores y sus amigos, y sus deseos y aspiraciones. Vamos, todo lo que se le pasa por la cabeza. Y cuando digo todo, es todo. En un mismo párrafo nos habla de lo que ha desayunado, lo poco que le gusta la lluvia, el examen de mates y la visita de su mejor amigo. ¿Con sentido? ¿Acaso todos y cada uno de los pensamientos de los niños tienen sentido? ¿Acaso lo tienen los de los mayores? Obviamente, la tipografía empleada para la narración es en comic sants, asemejándose así a una letra infantil, y alejándose de la aburrida tipografía de los libros de los mayores. Y Greg no sólo hace amena la lectura con sus reflexiones y vivencias poco afortunadas, sino que, además, incluye dibujos de todos sus pensamientos. 


Ilustraciones

Detalle de la ilustración
     Algo fundamental y característico de todos los Diarios de Greg son las viñetas. Con un formato de cómic, resumen de manera divertida cada una de las anécdotas que el protagonista nos va narrando (los códigos lingüístico y gráfico se corresponden). Apenas tienen “bocadillos” (diálogos), pero sí abundan las onomatopeyas. Los dibujos son sencillos, ya que el objetivo es que parezca que los ha dibujado el propio Greg, pero, a pesar de esta sencillez, el autor consigue transmitir las mismas emociones que con los textos, gracias a los gestos de los personajes.
 
     Para los niños a los que van dirigidos estos libros, encontrarse con estos dibujos es algo divertido, es un juego, e incluso podríamos llegar a decir que es un regalo. Mi primo Javi, del que os he hablado en posts anteriores y al que os presentaré al final de éste, me decía que le encanta ver los dibujos, "te resume la historia, la entiendes mejor, y además, son divertidos". 

 SÓLO ME QUEDA EL ANÁLISIS DEL CONTENIDO...

 
Análisis del contenido


¿Una persona es capaz de pensar las cosas de una en una? Cuando reflexionamos... ¿lo hacemos con un orden lógico? ¿somos capaces de expresar lo que se nos pasa por la cabeza a la perfección? En mi opinión, la respuesta a todas estas preguntas es NO. En mi día a día lo veo con los adolescentes a los que les doy clase. Son pocos los que “pillan”, por ejemplo, la sintaxis a la primera. Y esto es porque para realizar un análisis sintáctico de oraciones es necesario tener un orden. No podemos esperar que lo hagan de forma ordenada a la primera si todavía a muchos les cuesta encontrar el enunciado del ejercicio anterior. Y eso que estos son adolescentes. Imaginad LOS NIÑOS. Los pensamientos de los niños van a mil por hora. Está claro que poco a poco van aprendiendo a ser ordenados, a realizar las tareas poco a poco, a ser conscientes de lo que hacen bien y lo que hacen mal. Pero lo que se les pasa por la cabeza...


Pondré un ejemplo. Un adulto, al relatar una historia, lo puede hacer de la siguiente manera: El pasado lunes llovía mucho, así que antes de salir de casa cogí un paraguas. Iba con el tiempo bastante justo, así que fui corriendo al trabajo. El paraguas se me rompió con el viento y llegué empapado al trabajo.


Algo sencillo, ¿verdad? ¿cómo lo explicaría un niño? He de decir que yo no soy experta en niños, pero si algo he aprendido del Diario de Greg es que hay que ser paciente con sus reflexiones. ¿Por qué? Un niño (o quizás sólo Greg) lo explicaría así: Lunes. Odio los lunes. Ayer domingo dormí todo lo que quise y más. Y después estuve jugando unas cuantas horas a la play. Mi madre me hace mirar por la ventana siempre antes de salir, y menos mal que hoy la he hecho caso, porque llovía. Hace una semana pasó lo mismo, pero no la hice caso, así que llegué calado al cole. Mi hermano se ha llevado mi paraguas, así que tengo que elegir entre el de mi hermano pequeño o el de papá. He preferido el de papá, porque el otro tiene dibujitos infantiles. Al salir hacía mucho viento. ¡Qué bien me lo he pasado, parecía que volaba!...


Podría seguir. Lo que trato de explicar es que muchas veces los pensamientos de los niños no tienen un orden lógico. ¿O sí? Para ellos sí. Explican las cosas en función de SU orden, fijándose en detalles que a nosotros, los pobres adultos, nos pasan desapercibidos. Esto lo he descubierto con el Diario de Greg, pero si ahondamos un poco en la psicología infantil, llegamos a Piaget. ¿A que os suena? Sí, ese que afirmaba que en el tercer período evolutivo del niño, entre los 7 y los 11 años, ya comienza a tener un orden lógico de las cosas, sin embargo, su pensamiento está todavía anclado en la acción concreta que realiza. Su pensamiento abstracto está en fase de desarrollo, pero aquí debemos incluir la imaginación y la creatividad. A partir de los 12 años, el niño ya comienza a dar su propia explicación sobre el mundo, sobre lo que sucede a su al rededor. Y eso es lo que hace Greg de forma contínua.


Y aquí es donde llega en mi opinión el tema de este libro: la visión del mundo a través de los ojos y las palabras escritas de un niño de 11 años. Pero no del mundo en general, sino de SU mundo: su familia, sus amigos, su colegio, su barrio. 

En cuanto al argumento, no llegamos al argumento propiamente dicho hasta la página 158 (el libro tiene 217). Pero... ¡qué digo! esa es una visión de adulto! todo lo racionalizamos, todo tiene que tener una lógica. Claro, un adulto pensaría que el argumento en sí empieza en esa página porque es ahí cuando comienza la gran nevada y Greg se libra así de un buen castigo por causar desperfectos en el cole. Pero un niño te diría que estás totalmente equivocado (oh tú, adulto que no ve más allá de lo que hay escrito). Un niño te diría que desde el principio el libro te explica cómo en breve llega la navidad, el mal tiempo, que Greg sale a la calle mucho antes de la gran nevada a limpiar de nieve las entradas de los vecinos, que se aburre porque está en casa debido a que hace malo y que decide inventarse un periódico, y que como no lo puede repartir por el cole pega carteles en el muro del cole, los mancha, le descubren, le castigan, llega la gran nevada, y se libra de un castigo supuestamente policial que luego no resultaba ser tal cosa. Si todo tiene un orden lógico, o ilógico, el adulto sólo tiene que cambiar la forma de leer. 

A una adulta a la que le gusta el orden, como a mí, le resulta complicado establecer una estructura de este texto, por todo lo que he tratado de explicar anteriormente. Podríamos decir que, en general, tiene la típica estructura narrativa de inicio, desarrollo y conclusión. Aunque claro, esto es si hay historia, y en este libro, la historia como tal dura apenas 50 páginas, y todo lo demás son historias y reflexiones paralelas. (Estoy segura de que mi primo Javi me explicaría la estructura casi sin pensárselo, pero yo llevo un rato rompiéndome los sesos). 

El protagonista. ¿Cómo es Greg? 



Greg estudia secundaria, siempre tiene mala suerte, aunque no por ello desiste en intentar cada una de las ideas que se le pasan por la cabeza. Sus pensamientos son los propios de un niño de 12 años, donde cree que en el mercadillo navideño le están timando porque le cobran el pollo más caro, sin comprender el motivo (el dinero es una recaudación benéfica).Si lo pensamos bien, lo que él dice tiene su lógica, ¿no? 

    Greg es bueno y compasivo, no delata a sus amigos y prefiere cumplir el solo los castigos. Tiene conciencia y buena voluntad (aunque luego los planes no le salgan como tenía pensado). Y si hay una cualidad que tengo que destacar de él, es su creatividad. A pesar del tiempo que pasa con las videoconsolas, tiene innumerables ocurrencias dignas de ser apreciadas. 


¡Ah! Y algo en lo que estoy totalmtente de acuerdo. Él no hace ejercicio físico porque sea un vago, sino porque está ahorrando energías para el futuro. 

Los demás personajes

Rowley es el mejor amigo de Greg. Aunque también es bastante cansino y miedica, pero acompaña a Greg en todas sus andanzas.
Manny es su hermano pequeño. Es el niño mimado y consentido, todos hacen lo que él quiere. Pero a pesar de su edad parece que es el más listo (no se ata solo los cordones pero deja a toda la casa sin electricidad y calefacción excepto su cuarto durante la tormenta de nieve). 
 
Rodrick, el hermano mayor. “Va a su bola”, dormilón, se escaquea de los problemas, de las tareas de la casa y de cuidar a sus hermanos. Es desordenado. El típico adolescente. 

La madre, es la que se encarga de cuidar a unos y a otros, da ideas creativas, aconseja, le gusta intentar hacer deporte, es la que echa las broncas, no derrocha, sus hijos son sus ojitos derecho, y consigue regalos para todos por navidad a pesar de las incidencias. Es... una madre.

El papá de Greg es poco hablador, serio y muy trabajador. Pero también echa broncas y educa a sus hijos. 

Valores y contravalores

A través de la narración y las diferentes visiones del protagonista, se nos muestran numerosos valores educativos que debemos tener en cuenta. La mayor parte de ellos a través del colegio, pero también en la familia. Se nos habla por ejemplo de la campaña contra el acoso escolar, de la recogida de alimentos para personas desfavorecidas, del mercadillo de navidad para obtener dinero y donarlo a campañas benéficas, los regalos donados en la Iglesia, de la venta de productos por el mismo motivo... También se potencia la imaginación y la creatividad infantil y juvenil. 

 Eso sí, al final, al pobre Greg, las cosas no le salen como tiene previstas...


 El lenguaje y el uso de la lengua

En mi opinión, el texto se adapta a la perfección al lenguaje infantil y juvenil, ya que este libro lo pueden leer tanto niños de 9 años como de 12 o 13. Las oraciones son en su mayoría simples. Apenas hay abuso de coordinación y subordinación de las estructuras, lo que facilita la lectura. Las estructuras sintácticas son sencillas y el vocabulario es adecuado, ya que apenas he encontrado palabras complicadas o cuyo significado puede parecer contradcitorio. 

     Esta utilización de un lenguaje sencillo es debido a que el narrador, en primera persona, es un niño de 12 años (nuestro ya amigo Greg), por lo que la narración se debe adaptar a su forma de expresarse. Y este narrador se dirige directamente al lector. Lo vemos en expresiones como "no vas a creerte lo que hemos encontrado". 

    Asimismo, se emplea en prácticamente todas las páginas el recurso de las mayúsculas para remarcar los pensamientos (en la variedad oral, lo diría en una voz más alta), y dar un mayor énfasis a aquello que quiere expresar. 

   Ya hemos dicho que la lengua se debe adaptar a la que utilizaría un niño de 12 años, y a lo largo de todo el libro aparecen numerosas expresiones propias de niños: "A Rowley y a mí nos pareció que sería la mar de molón...”

En conclusión, el Diario de Greg 6 ¡atrapados en la nieve! me ha parecido un auténtico descubrimiento. Me recordaba a mi época de niña cuando leía los libros de Sisi emperatriz, en los que tras cada capítulo venía un cómic con el resumen. Me ha gustado volver a ser niña, o al menos intentar realizar la lectura con otros ojos. Bien es cierto que me costó centrarme, ubicar esa multitud de pensamientos supuestamente inconexos. Pero una vez que entendí el significado de las palabras, comencé a disfrutar de la lectura. Si no os he aburrido y habéis llegado a leer hasta el final de este análisis, os animo a que, como yo, VOLVÁIS A SER NIÑOS (lo escribo en mayúsculas como Greg).

Y no podía terminar de otra manera... Os presento a mi primo Javi, mi ayudante y asesor literario. 
mi primo Javi

 (El billete de 500 es en realidad un marca-páginas...)


webgrafía

www.diariodegreg.com

www.news.com.au/entertainment/books/jeff-kinneys-the-diary-of-a-wimpy-kid-books-sold-almost-100-million-copies-earning-him-a-naming-as-one-of-time-magazines-top-100-most-influential-people-in-2009/story-fn9412vp-1226360408770 

www.theguardian.com/childrens-books-site/video/2011/nov/21/jeff-kinney-wimpy-kid-interview

http://www.psicoactiva.com/infantil/desarrollo.htm 

http://www.juntadeandalucia.es/averroes/~cepco3/competencias/mates/infantil/pensamiento_logico_en_la_educacion_infantil.pdf

http://www.eduval.es/ucv/material1.pdf












10 comentarios:

  1. Perfecto. Un gran trabajo y, además, muy divertido y fácil de leer. Mira a ver por qué la bibliografía sale escrita con caracteres griegos...

    ¿Te animas a participar en las reseñas de e*SpectacularKids: http://www.espectacularkids.com/blog/es/categoria/resenas-2/ ???

    ResponderEliminar
  2. Gracias Irune!

    Con respecto a la bibliografía, en mi ordenador no me aparece en caracteres griegos... probaré desde otro esta semana a ver!

    Voy a ver en qué consiste lo de e*SpectacularKids, pero... ¡tiene buena pinta!

    ResponderEliminar
  3. Me he divertido muchísimo leyendo tu artículo María Rosa. No conocía ni al autor ni el libro. Lo tendré en cuenta para mi futura docencia, porque tal y como has hecho la actividad, creo que la obra que tiene buenísima pinta. ¡Gracias!

    ResponderEliminar
  4. Gracias, vale! abriste una puerta donde habìa solo un muro (adulto, por cierto)

    ResponderEliminar
  5. Me ha servido mucho de ayuda! Gracias

    ResponderEliminar